jueves, 18 de diciembre de 2008


martes, 2 de diciembre de 2008

Composición. Tema: Evaluación

*Todos sabemos que es necesaria la evaluación, eso no se discute.
Se debe evaluar para saber hasta que punto los alumnos se apropiaron de los contenidos desarrollados en clase.
Qué fue lo que se aprendió, y qué puntos no fueron entendidos. Históricamente se hizo comparando los objetivos planteados con los resultados obtenidos, luego se contemplaron los procesos.
Las instituciones se han valido de este método para ir determinando el nivel de la escuela, de los cursos, y ajustando sus cajas curriculares a las necesidades de los alumnos o a las demandas de la sociedad.
De ese modo se conoce la realidad educativa del alumnado.
*Lo que se discute es cómo.
Para un correcto diagnóstico de la evolución de su aprendizaje, es necesaria una evaluación individual, aunque el trabajo sea realizado en equipos, o en talleres, y teniendo en cuenta objetivos, planteados al principio de la tarea, por supuesto también hablamos de objetivos particulares para cada alumno según sus necesidades o aptitudes a desarrollar.
Esto es importante destacarlo porque, si bien se plantean objetivos por curso, por asignatura, etc, a nivel curricular o institucional considero que es una forma de atender a la diversidad, el tratar al menos de hacer un diagnóstico personalizado, para que cada alumno tenga la posibilidad de desarrollar al máximo sus potencialidades.
De modo que el proceso de evaluar sea también personalizado, teniendo en cuenta los tiempos y objetivos con que cada alumno trabajó.
Sería ideal que cada uno tome consciencia y llegue a controlar sus procesos y su evolución, de modo que llegado el momento de la evaluación, fuera él mismo quién presente y defienda un registro de lo aprendido en clase. Esto podría lograrse, si las asignaturas fueran aplicadas a trabajos prácticos, donde el alumno comprometa, lo aprendido en clase más el trabajo creativo, en todas las áreas, no solo la plástica.
De ésta forma cambia la concepción que se tiene de la instancia evaluativa.
El alumno se presenta seguro de sí mismo, de su tarea, de lo aprendido, por ejemplo, cuando se preparan para la feria de ciencias. No solo exponen con entusiasmo lo que han investigado con la maestra, sino que profundizan porque les despierta interés.
Al demostrar todo lo que saben, elevan su autoestima.

Considero que todas las formas son válidas dependiendo del nivel que se evalúe.
El diálogo es siempre la mejor herramienta para conocer y comprender al otro, pero cuando se usa para evaluar debe ser lo mas ameno y desestructurado posible, para despojarlo de la carga de presión inquisidora que conlleva y que tanto tensiona al que está siendo sometido al cuestionario.
El ejercicio de escritura involucra además del tema específico otros, como gramática, desarrollo del vocabulario, entre otros.
Y en nuestra práctica docente entraríamos en la discusión sobre qué se evalúa y qué no en el arte. Personalmente evaluaría en cada caso particular los procesos, si superaron las dificultades que presentaban al inicio, si fueron capaces de solucionar inconvenientes o encontrar salidas creativas a problemas. Si se animaron explorar formas no convencionales de realizar los trabajos, y demás, finalmente tendría en cuenta la forma en que los alumnos valoran su propio trabajo por que ello da muestra de su autoevaluación.

En nuestro instituto de formación conviven varios tipos de evaluación, los unos en perjuicio de los otros, a mi entender.
Los antiguos métodos, ante el tribunal donde el alumno de forma oral debía repetir como loro todo lo que el docente, no solo dictó y dio en bibliografía, sino que además lo que comentó en clase. Y como si esto fuera poco, además se le exprimía al alumno alguna opinión.
El examen final escrito no presentaba muchas variantes.
Los talleres cerraban el ciclo con trabajos en mediano o gran formato con un ejercicio teórico fundamentando lo práctico. Pero sin demasiada consistencia por no ser una práctica regular el hecho de hacer teoría sobre nuestras propias actuaciones.
Y finalmente la innovación, de la mano de la tecnología, los nuevos métodos de evaluación. Donde se toman en cuenta tal vez las mismas cosas, pero desde la óptica del alumno. Es decir que la bibliografía sigue estando, los comentarios y los diálogos también, pero esta vez se observa que puede hacer el alumno con todo ello. Es como si en el método antiguo se comenzara el tribunal preguntándole al alumno que opina de todo lo que estudió.
Considero que es mucho mas rico el nuevo sistema de evaluación, en un sentido integral, por que el estudiante no solo reúne un bagaje de conocimientos sino que además puede elaborar un juicio crítico y de valor sobre lo que está tratando. Como puede llegar a tener un nivel de discusión igualitario con sus docentes, considerando que se prepara para serlo también.
A lo que me refería al decir en perjuicio de los otros, es por que producen tal desinterés los antiguos, que uno termina postergándolos y dedicándoles menos tiempo (en mi caso personal)

miércoles, 22 de octubre de 2008

El camino

El camino.
Muchas veces se ha usado la metáfora del camino para referirse a la vida misma. “Un camino de espinas”, para remitirnos al dolor, “un camino cuesta abajo o cuesta arriba, según las dificultades que nos toca pasar. “Tomamos caminos diferentes” cuando decidimos separarnos de alguien. “Nuestros caminos se cruzaron”, cuando nos encontramos con alguien. Y como dice la canción: caminantes no hay caminos, se hace camino al andar…
Cada uno de éstos esta trazado por las decisiones que tomamos, por los eventos que marcan huellas en nuestra humanidad. Por los accidentes o incidentes, por las alegrías, por las tragedias, por las buenas y las malas, rosas o espinas.
Pero la principal característica es que en ellos, cada uno es su principal protagonista. Cada camino es un destino. Una obra unipersonal.
Ahora bien, que sucede con aquellos cuyo destino queda reducido a sentarse a la vera del camino de los otros?
En un suspiro se escapa su aliento. Encorvadas hacia delante en su sillón. Con mínimos movimientos siguen con sus ojos grises a quien pasó a su lado. Con un silencio profundo poblado de recuerdos (tal vez).
Están ahí, solamente. No saben de celulares, (cuando para nosotros es difícil imaginarnos la vida sin ellos), ni computadoras. Muchas ni siquiera aprendieron a leer porque en “sus tiempos” no hacía tanta falta. No se explican porque hay tantas mujeres desnudas en las revistas, si antes era mal visto mostrar las rodillas.
No deciden que van a comer o como se van a vestir, ni siquiera si van a salir al jardín.
Son mujeres que por diversas razones han quedado solas, y su avanzada edad o deterioro físico les imposibilita ser autosuficientes. Por lo que en resguardo de su seguridad se optó por internarlas en un Hospital Geriátrico.
Entonces cómo aplicar correctamente la metáfora? Porque para los demás que transitamos, la vida sigue, con sus cambios, altibajos, ganancias y pérdidas, pero a ellas las vemos detenidas en un “sin tiempo” al costado del camino, apenas perceptibles, olvidables.
¿Será que el ritmo vertiginoso de los tiempos que nos tocan vivir han convertido nuestro camino en una vía rápida, donde detenerse por un instante a contemplar lo inminente del paso de los años en el semblante de una mujer, implica relegar tareas impostergables?
¿O acaso es el miedo a lo inminente lo que provoca que aceleremos nuestro camino para no detenernos a contemplar?

viernes, 3 de octubre de 2008

Ausencias


¿Qué hago con lo que veo?
He estado realizando visitas al Hospital Geriátrico y he podido apreciar imágenes conmovedoras, historias de vida, expresiones de los más variados sentimientos y con ellos he conformado un bagaje de conocimientos que me gustaría transmitir para que otras personas puedan sentirse afortunadas como yo de poder aprehender esas experiencias.
Heme aquí ante un profundo dilema: gran parte de la angustia y expresiones de tristeza y soledad que pude ver en ese lugar se debían a que esas señoras padecían ausencias, una larga espera por alguien que “en cualquier momento debe llegar”. Entonces ¿puedo yo pretender sensibilizar con mi trabajo a una sociedad que encarna esas ausencias?
Prefiero realizar mi tarea sin demasiadas pretensiones, no por que no tenga fe en los sentimientos de los demás sino por que quiero ser fiel a mis propia subjetividad y no estar sujeta al que sentirán lo otros.

Las ausencias. Bien podría ser ésta la frase que resume y condiciona los estados de ánimo de estas damas.
La ausencia de juventud: que se fue llevándose afectos, alegrías, dinamismo y dejó junto con los recuerdos, esos surcos en la piel y la expresión en la mirada de angustia ante un presente lleno de vacíos.
La ausencia de utilidad: contemplarse las manos, los dedos deformados y cruzarlas una sobre la otra para que reposen inmóviles, cuando en otro memento labraban la tierra y amasaban el pan.
La ausencia de sí mismas: convertidas en una mas, lejos quedaron los gustos personales, las preferencias, que distinguen e individualizan.
La ausencia de los otros; esos que traen noticias del mundo, de la familia y que por momentos las hacen sentir parte de su realidad. Los que vienen cuando pueden por que tienen sus ocupaciones.
La ausencia de voz, porque para quien quiere escuchar, los silencios son ensordecedores.

jueves, 2 de octubre de 2008

La vida en el rostro


Cuando planteé el proyecto en realidad consistía solo en realizar retratos donde las señoras pudieran no solo verse reflejadas sino que además se sintieran protagonistas. Que la muestra se realizara en presencia de ellas y que recibieran la atención y admiración del público, como un homenaje por su longevidad.
Al asistir al Geriátrico comencé a tomar registro no solo de la imagen física de las abuelas sino de sus realidades, a través de sus testimonios fui conociéndolas, y conmoviéndome con sus relatos hasta el punto de reformular todo mi proyecto…y en este punto me encuentro, con un cúmulo de información y emoción y buscando el camino hacia donde encauzarla.
Debo confesar que soy una persona muy permeable, y que iba dispuesta a dejarme sorprender, tal vez por eso considero mis visitas tan ricas, que me gustaría compartirlas.
La primera vez que fui, buscaba a una enfermera para entregarle una nota que avalaba mi proyecto, caminando por un pasillo una anciana pidiendo que le dieran la mano capturó mi atención, los ojos tristes, el rostro con expresión de angustia y su voz desesperada que apagaba todo el silencio de la siesta, me acerque y le pregunté que necesitaba, asombrada por que la enfermera había pasado sin inmutarse, ella insistía que le dieran la mano, necesitaba levantarse, por que sola no podía. Ante la insistencia y temiendo por desconocimiento de su condición física le pregunté qué tenía que hacer?
A lo que respondió con la misma urgencia –Tengo que cocinarle a mi marido!

En el mismo pasillo, días después, ya con lápiz en mano me senté junto a Hipólita (los nombres pueden no ser los reales), serena me observaba con un aire de desconfianza, después de escuchar las razones de mi visita, contestó mis preguntas, pocas, suficientes para saber que está en ese lugar por que sufrió una fractura de cadera y quedó en silla de ruedas y no puede permanecer en su casa, en el campo. Con una perturbadora lucidez me dejó en claro que el tiempo transcurre muy lento en ese pasillo.

Josefa se nos sumó y luego de las presentaciones de rigor se abrió el diálogo, que fue descorrer el telón de un escenario donde se suscitaban imágenes que me narraba con vívida pasión. Una gran cosecha, toda la familia trabajando junto al padre, mujeres a la par de los hombres, abundancia de granos, de trabajo, de fuerza.
Josefa me cuenta no como si lo estuviera recordando sino como si lo estuviera viviendo.
Cuando terminé su retrato, lo miró, pero no vio su imagen, me preguntó si era uno de los señores que pasaban en ese momento por ahí. –Puede ser- Le contesté.

En mi siguiente visita me dirigí al comedor. Me senté al lado de una señora que muy preocupada me contó los angustiantes sucesos que había vivido ese día.
-Usted sabe señora que yo no se qué hago acá, quién me trajo. Con la desazón dibujada en el rostro, me contó que estaba en casa de una amiga y que había salido para comprar algo, que no recuerda que, ni que hizo con lo que compró, y no sabe como vino a parar en este lugar. Me asegura que se esfuerza en recordar y no puede. -Y llega la noche y hace frío y no sé si no me van a decir que me vaya.
El empeño que pone en situarse en tiempo y espacio se evidencia en su postura, en la mano que sostiene su frente, en la mirada que busca algún objeto o persona que le resulte familiar.
Está en silla de ruedas, y hace varios años que está allí.

He visto, he oído, pero más aún he percibido en cada línea de sus rostros fragmentos de su vida. Como su expresión se ilumina o se ensombrece según el recuerdo que transiten, por eso es que mis retratos tan bien logrados de parecidos reales son tan poca cosa si no pueden siquiera asomarse al enorme espectro de sensaciones que se reflejan en sus miradas, en sus muecas o en sus silencios, la angustiosa espera de que el tiempo pase, por que no hay mucho mas que esperar…

jueves, 7 de agosto de 2008

Haz lo que yo digo y no lo que yo hago?


Complicado!!! Es adoptar una postura y dar una opinión personal sobre la Didáctica en este momento de la carrera.
Por un lado uno ha ido aprehendiendo lo necesario para aprobar las materias desde la bibliografía, y cumpliendo con los requerimientos de cada cátedra, de modo que llegamos a entender lo que es la Didáctica, ahora bien, una vez que sabemos lo que es, y lo que se espera que un docente conocedor de la misma sea, estoy en condiciones de señalar que hay una diferencia muy grande, entre lo que se dice y lo que se hace.
Por supuesto no es mi intención generalizar, pero considero que los docentes que están preparando futuros docentes deberían mas que nadie, enseñar con el ejemplo.
Lamentablemente el escenario de la escuela no escapa al desgano y al desinterés no sólo de los alumnos, que es tan comentado por estos días, sino también por muchos docentes, que se han quedado estacionados en el tiempo sin advertir que es imperioso renovar sus recursos didácticos para estar a la altura de las demandas cada vez mas exigentes de los alumnos, y no solo del profesorado.
Si la didáctica es la disciplina de la que nos valemos para sumar distintas formas de transmitir los contenidos haciéndolos comprensibles, es decir optimizando la transposición, entonces es imperativo que cada docente refuerce su compromiso con la profesión y relea esta materia, para mejorar el vínculo, la comunicación, y obtener un acercamiento desde las expectativas del alumno.
Superadas las mezquindades que puedan surgir de las didácticas específicas, considero que la didáctica general debe orientar de manera constante, el “como enseñar”, es decir esta disciplina debe progresar y evolucionar conforme lo hace la sociedad, para asegurarse de estar a la altura de las demandas de un alumnado en constante cambio.

jueves, 10 de julio de 2008

Un poco de actualidad.


Sorprendida, azorada, por ver en los noticieros, las actitudes de alumnos que faltan el respeto a las docentes, en el último que ví le pusieron un profiláctico en la cabeza y prendieron fuego al cabello a una profesora que dijo no haberse dado cuenta de nada. La anterior que tomó estado público había sido víctima de burlas mientras continuaba con su explicación. La actitud de los alumnos es totalmente reprovable, una completa falta de respeto y de educación. Ahora se debate que debe hacer la escuela, ¿expulsarlos? no, la mayoría de las escuelas sostiene una política de no exclusión. ¿amonestaciones? ¿gabinetes? Todo está en discusión. Lo que parece que no se cuestiona, al menos tan abiertamente es la capacidad de las docentes al frente de la clase. Bajo ningún punto de vista pretendo generalizar. Solo referirme a aquellas que aparecen en los medios siendo objeto de burlas. La primera mencionó tener problemas psíquicos, incluso su forma de hablar a los medios no pareció ser muy coherente, ¿es apta para estar al frente de una clase?.
La otra docente era rodeada, y mientras leía la cubrían con un paraguas obstaculizandole la visión, pero ella continuaba explicando como si nada extraño sucediera, ¡el grado de autismo de esa mujer era impresionante!

Por supuesto que no quiero justificar el horrible comportamiento de los alumnos, pero me parece que es consecuencia de la desidia de quienes están a cargo, es una terrible manera de llamar la atención. Lo que sí hallo positivo es que podamos ver la intimidad del aula, para analizar, como está la escuela por dentro, por qué estamos como estamos.

No es casual que salgan a la luz este tipo de filmaciones y no de una clase donde todos trabajen en un ambiente de respeto y cordialidad, interesados en los contenidos que están apehendiendo. Creo que implícitamente estas actitudes están denunciando y demandando por mayor capacidad en el cuerpo docente.

No es fácil para una alumna que está por egresar del profesorado asimilar esta realidad, exige mayor esfuerzo y compromiso pretender ejercer la profesión y estar a la altura de las circunstancias, o por lo menos, ser consciente que si no es posible atender de manera óptima las necesidades académicas de los alumnos, hay que dar un paso al costado y dedicarse a otra cosa.

sábado, 5 de julio de 2008

Encuesta a adolescentes

Continuando con la encuesta acerca de la escuela, le pregunté a dos chicos de Kenedy: ¿qué significa la esc. para ustedes hoy?
1-Un lugar para estudiar.
2-Lo mismo.
Pensás seguir estudiando cuando termines el secundario?
1- Si, abogacía
2-No sé.
¿Tenés la posibilidad de trabajar en algo, si no estudiás?
2-No
Cuál es la materia que más les gusta?
1-Matemática
2-Ninguna.
Alumnos de Comercio respondieron:
¿qué es la esc. para vos hoy?
7m0 año- una porquería.
8vo. año- una carcel. Vengo por que es la única vez en el día que como facturas.
9no. año- un manicomio. Vengo por que me mandan.
¿Piensan seguir estudiando cuando terminen?
-Si seguimos así no.
-Sí, electricista, me gusta matemática.
Piensan en algún trabajo para hacer?
- vender aluminio.
- Vender botellas.
¿Tienen buena relación con los docentes?
-No, malísima.
Había en el grupo uno de Técnica:
_La escuela es un bien para todos. Si no vas a la escuela, después no sos nada, pero deberían alargar los recreos.
¿Cómo se llevan ustedes (los de Comercio) con las demás escuelas? veo que acá hay alguien de Técnica, y con los otros?
-Nos llevamos con todos bien menos con los de Kenedy, se hacen los conchetos, los muy estudiosos. Que no vengan acá porque se arma lío....

Comentario de texto.

La resistencia.
¿Qué puedo decir de este ensayo? Todo lo que leí en el libro son reflexiones a cerca de los cambios que ha sufrido el hombre en sus valores, en sus actitudes a lo largo de la vida. Las mismas observaciones he podido realizar yo con unos cuantos años menos que Sábato, no es que pretenda compararme con el genio creativo del escritor, sino que al reconocerme sensible a los afectos, educada en los “antiguos” valores, y en el respeto por la naturaleza es que resulta fácil encontrarse en sintonía con su pensamiento.
El autor afirma que el hombre transita por la vida a toda velocidad en la postmodernidad, tanto que no le queda tiempo para detenerse como otrora a contemplar un atardecer, disfrutar de una charla, o del almuerzo en familia. Se ha desvalorizado la palabra, así como la dignidad ha perdido jerarquía para ser reemplazada por la fama mediática. Su planteo suena melancólico ante un pasado mejor, ante un presente que no augura mejorías. Se describe a sí mismo esperando a la muerte, amigado ya con ella. La resistencia que propone no es mas que apelar a la humanidad, aprender o reaprender cuales son los derechos de que dispone un hombre para poder forjar su individualidad, o recrear su espíritu. Depositar en los niños la esperanza de un futuro, pero activamente, cultivando en ellos aquellos valores que los adultos hemos perdido. Dándoles las herramientas para que sepan defenderse incluso de nosotros y puedan construir su vida con bases sólidas.

viernes, 30 de mayo de 2008

La clave de lo postmoderno: hacia un arte global.(Jorge Glusberg. cap. XVII)

Las innovaciones y recursos tecnológicos produjeron hondas transformaciones en el arte, porque las ejercieron en la sociedad entera.
La introducción de nuevos medios, como lo fue la fotografía en sus comienzos generaron varias hipótesis en el imaginario colectivo, como que las nuevas tecnologías sustituirían las formas y elementos existentes; que solo realizarían tareas conocidas; y que traerían un cambio total en beneficio de los seres humanos. Hoy sabemos que ninguna de estas predicciones se cumplió. Pero sí que han marcado un camino de progreso hacia donde se han dirigido las sociedades, a diferente ritmo, pero sin retorno.
Dicho camino ha provocado un quiebre en la linealidad de la historia del arte poniendo a consideración y cuestionamiento el rol del arte en la sociedad, así como el papel del artista. La tecnología al alcance de la mano ha abierto un gigantesco abanico de posibilidades expresivas donde contemplamos con asombro un nuevo paradigma, donde se jerarquiza el proceso de creación interactivo entre el artista y el espectador, la pluralidad de medios, la apertura de nuevos espacios de exhibición. La oportunidad de obtener imágenes instantáneas (video arte) y poder corregir, editar y ver de forma inmediata, rompe también con la estructura temporal tradicional de la cinematografía, con la sacralidad del arte, la idea del museo y galería como único espacio posible de legitimación.

martes, 27 de mayo de 2008

Ensayo de metafísica barata y zapatos de goma...


¿No te ha pasado que te presentan a alguien que ves por primera vez, y sentís que ya lo conocías aunque no recuerdes de donde?
¿No te ha pasado que te adelantás a las respuestas que te van a dar por que de alguna manera preveés las reacciones como si en circunstancias previas lo hubieses experimentado?
Hay mucha bibliografía, desde novelas de ciencia ficción hasta investigaciones científicas en las que se tratan temas como la regresión a vidas pasadas en las que realizan acercamientos, mas o menos creíbles, a estos temas.
Pero siempre volvemos a la disyuntiva: creer o no creer.
Esta postura, la que yo he decido adoptar, al menos hasta que decida tomar la que demuestra lo contrario, dice que somos (los humanos) seres de energía encarnados, que tal como lo explican algunas religiones somos parte de un Ser Superior. Que en un tiempo previo al nacimiento tuvimos una existencia no matérica, es decir espiritual, en la cual poseíamos sabiduría de todas las cosas. Pero aún así debíamos construir aprendizajes. En ese tiempo es donde elegimos las experiencias que necesitábamos vivir para evolucionar, es así como cada ser o cada alma eligió los padres que habrían de abrirles las puertas a la vida, y de allí en adelante cada acontecimiento del que esa persona habría de nutrirse.
Sosteniendo esta postura, es fácil imaginar que en realidad, existe una conexión previa con las personas con que debemos compartir experiencias, de cualquier tipo, en esta vida. Al hablar de conexión me refiero justamente a esa sensación que difícilmente podemos explicar cuando sentimos que ya conocemos a alguien que vemos por primera vez. Y es que posiblemente este tránsito por la vida signifique un reencuentro con seres con los que hemos estado antes de nacer, o incluso yendo aún mas lejos en vidas anteriores.

¿No te ha pasado a veces que te sorprendés cuando en la elaboración de un proyecto se dan de forma “casual” las posibilidades para que todo sea óptimo incluso mejor de lo que podrías haberlo planeado?
¿O por el contrario tenés todo fríamente calculado sin dejar afuera ningún detalle y en el momento de ejecutarlo, algo se vuelve en contra y la única explicación que encontrás es que “Dios no quiso”?
He escuchado reflexiones que manifiestan el disgusto ante la posible existencia de un destino en el que ya todo está previamente digitado, por la escasa participación que tendríamos en la vida, limitados a meros ejecutores de un plan ajeno.
Yo prefiero pensar que ese plan lo hicimos nosotros mismos en esa existencia espiritual en pos de un correcto aprendizaje y que cada vez que nos acercamos al plan original es cuando observamos con desconcierto como las “casualidades” superan nuestra capacidad de racionalizar.
De mas está decir que no creo que existan las casualidades, sino mas bien las causalidades
Esta teoría que por supuesto no inventé yo, puede parecer demasiado extravagante para el pensamiento occidental, sobre todo con la doctrina de la religión mayoritaria. Pero para quien decida ir mas allá de lo que es aceptado, este camino de búsqueda promete respuestas que si bien no pueden comprobarse empíricamente, al menos dan una sensación de calma al espíritu, ya que uno tiende a creer que éste trayecto es de aprendizaje con lo que podés tomar conciencia de la justa medida de las cosas, el valor de lo material, y los afectos. Pero sobre todo te brinda la posibilidad de aceptar lo que no podés cambiar, como resignarte a las pérdidas.
En este tema me quiero detener, porque es tan hondo el vacío que provoca la ausencia de un ser amado que ya no está.
Hablo de vacío porque tendemos a pensar que las personas que elegimos ocupan un lugar en la estructura de nuestra vida. Y al partir debemos continuar con una parte menos.
Al referirme a los que elegimos digo aquellos amigos, enemigos, socios, parejas y todos aquellos seres que de una u otra manera transitan con nosotros este trayecto, por mayor o menor tiempo pero que nos ayudan en nuestro aprendizaje. No solo los que consideramos el mejor ejemplo a seguir, sino también aquellos a quién nunca querríamos imitar nos aportan la lección, depende de nosotros, de la apertura de conciencia que tengamos como para darnos cuenta lo que tenemos que rescatar en cada ocasión.
Ahora bien, desde mi lugar, y con mis teorías (porque al creerlas las hago mías), siendo Seres de Energía, tenemos una existencia continua, solo sufrimos transformaciones. –(primera ley de la termodinámica: “la energía no se destruye, solo se transforma.”)- Entonces puedo suponer que no existe tal vacío, que en nuestra viseral forma de pensarnos, solo vemos la ausencia, es decir la no presencia física, por que resulta obvia a nuestros sentidos.
¿Pero energéticamente? Si consideramos, no solo los recuerdos, sino cómo la persona ausente ha influido, modificado, o forjado nuestro carácter o personalidad, podremos contemplar como su esencia permanece, aunque imperceptible ocupando ese lugar que consideramos vacío en la estructura de nuestra vida.
Escuché una vez a una señora que decía, que las decisiones importantes de su vida las había tomado pensando en qué le hubiese aconsejado su padre, que mientras vivió fue para ella su principal guía. Tan importante fue su impronta, y tan profundo el conocimiento del otro, que aún después de su muerte, ella podía intuir cual hubiera sido su respuesta.
Claro que, de carne somos, no voy a pretender que es fácil aceptar que la persona que amás no está para abrazarte, o reflejarte en su mirada, o alegrarte con el sonido de su risa. Solo que mas allá de la carne somos espíritu, somos energía. Y teniendo conciencia de ello podemos “sentir” como fluímos en armonía con los que amamos, como un todo continuo, como
si nunca se fueran.

entrevista sobre la escuela

¿Qué es la escuela para vos?
¿Qué es lo que mas te gusta de la escuela?
¿Qué querés ser cuando seas grande?

Jesús -9 años: 4to. Año. Esc. Brown.
- donde me enseñan a dibujar, a escribir, a leer.
- educación física.
- camionero.
Magdalena -9 años. 5to año. Esc. Brown
- el lugar para aprender.
- Que nos enseñen a dibujar, a leer.
- Policía.
María de los Ángeles -9 años. Esc. 7.
- un lugar donde aprendés.
- Música.
- Odontóloga.
Fátima -9años- Esc. Laprida.
- un lugar donde te enseñan.
- Música.
- Maestra.
Víctor -10 años. Esc. Normal
- es importante.
- No se
- Policía.
Santi - 8 años. Esc. Normal.
- me gusta, mas o menos.
- Profesor de Educación Física.

¿Cómo ves la Escuela Hoy?
Fabián- 16 años de docente
-La escuela está pasando un período de transición y ha cambiado no solo la mirada social desde los padres, alumnos, incluso de los docentes.
Héctor –
-La escuela es una institución en decadencia, pero sigue siendo un instrumento de transmisión de cultura y de valores humanos.
El problema de las escuelas de hoy son los docentes.
Betina -8 años de docente.
-la escuela es el lugar físico donde se enseñan valores, actitudes, aprendizajes cognoscitivos. Hoy se la ve desactualizada, el Estado no le da apoyo económico. Está de brazos caídos como la sociedad. Y los alumnos han perdido completamente el interés po la escuela.

viernes, 9 de mayo de 2008

Que podemos hacer nosotros?


Observar, y enseñar a observar, es preciso que aprendamos a ver como otras personas han sabido aprovechar los recursos disponibles en beneficio de la expresión tanto desde la estética como desde el concepto, debemos ser antropófagos para apropiarnos de la agudeza que nos posibilita var mas alla de lo superficial y encontrar el valor expresivo en cada objeto, por mas cercano y cotidiano que nos parezca. Trasmitirlo como un eje temático estimulará la creatividad y el aprovechamiento de materiales que habitualmente serían subestimados por los alumnos.

La eco-plástica



La Eco plástica es un conjunto de pequeñas perversiones desinfectadas, belleza recuperada, no reciclada. Es el arte de rescatar, ordenar y adaptar.Un elemento puede ser menos basura que él mismo en otro estado, todo avanza hacia la interrupción de la relación sensible con el hombre, hasta que indefectiblemente se produce. A partir de esta ruptura la propuesta eco plástica busca las señales en los ciclos cumplidos por las cosas. Lo hace a sabiendas de que el hombre y la basura coexisten en el mismo universo, y el hombre se muestra indiferente a aquello que no le es útil.La eco plástica es arte basura pero no recicla. Considera que todo lo reciclable es materia prima, incluso para la industria, responde a fórmulas económicas. Basura no es simplemente lo que no sirve para nada, porque en todo lo fabricado no existe algo que no sirva. Aunque sea para fines perversos, sirve. Los objetos están destinados a cumplir con alguna finalidad, provienen y son principios de transformación. La eco plástica espera el milagro pero se conforma con la belleza, su razón de ser es la propuesta que toda conducta humana le sea propia. Es más representativa de la búsqueda que de su realización. Su pureza radica en evidenciar su origen. Jamás oculta lo casual del hallazgo.Es el ordenamiento artístico de lo fortuito.

Jorge Hariyo